Meditación y mindfulness para niños: cómo y por qué practicarlo

Meditar o practicar mindfulness no solo es algo que beneficia a los adultos, sino que también puede ayudar a los niños a mejorar su bienestar emocional y mental. En este blog post, te explicaré qué es la meditación y el mindfulness, cómo puedes practicarlos con tus hijos y por qué es importante hacerlo.

¿Qué es la meditación y el mindfulness?

La meditación es una práctica que consiste en concentrar la mente en un objeto, pensamiento o actividad con el objetivo de alcanzar un estado de relajación y concentración profunda.

El mindfulness, por otro lado, es una práctica de atención plena que se basa en prestar atención al momento presente y a los pensamientos y emociones que están ocurriendo en ese momento, sin juzgarlos.

Ambas prácticas tienen como objetivo ayudar a las personas a reducir sus niveles de estrés, ansiedad y depresión, mejorar su bienestar emocional y mental y aumentar su capacidad de concentración y enfoque.

¿Por qué es importante practicar meditación y mindfulness con los niños?

Los niños también pueden beneficiarse de la práctica de la meditación y el mindfulness en varios aspectos:

• Les ayuda a aprender a manejar sus emociones y a regular su comportamiento.
• Mejora su capacidad de concentración y enfoque, lo que les será útil en su vida académica y personal.
• Les enseña a prestar atención al momento presente y a no juzgar sus pensamientos y emociones, lo que les ayuda a ser más conscientes y a aceptar sus sentimientos y pensamientos de una manera saludable.
• Les ayuda a disminuir sus niveles de estrés, ansiedad y depresión, lo que resulta en un bienestar emocional y mental óptimo.

¿Cómo puedo practicar la meditación y el mindfulness con mis hijos?

No hay una forma única de practicar la meditación o el mindfulness con los niños, pero a continuación te propongo algunas ideas para que puedas comenzar:

1. Practicar la respiración consciente

Una de las formas más sencillas y efectivas de practicar el mindfulness con los niños es a través de la respiración consciente. Se trata de que los niños se concentren en su respiración, notando como entra y sale el aire de su cuerpo. Esto les permitirá tomar conciencia de su momento presente y a relajarse.

Para hacerlo, puedes sentarte en un lugar tranquilo con tus hijos, cerrar los ojos y respirar profundamente. Después, puedes pedirles que sientan cómo el aire entra y sale de su cuerpo, diciéndoles que piensen en cómo se siente ese aire al pasar por su nariz y salir por la boca.

2. Practicar la atención plena en los sentidos

Otra forma de practicar el mindfulness con los hijos es a través de los sentidos. Se trata de que se concentren en los sonidos, olores, sensaciones táctiles, gustos y colores que vienen de su entorno y que, muchas veces, pasan desapercibidos.

Invita a tus hijos a que se sienten en un lugar tranquilo y a que se concentren en la sensación de su cuerpo al tocar algo, en el olor de una flor o en los colores de un paisaje. Esta práctica puede ayudarles a ser más conscientes del mundo que les rodea y a conectar con él de una manera más profunda.

3. Practicar la meditación guiada

La meditación guiada es una forma de meditación en la que alguien guía la meditación a través de una serie de instrucciones verbales. Este tipo de meditación puede ser ideal para los niños, ya que les ayuda a concentrarse y les da una guía clara sobre lo que deben hacer.

Puedes encontrar meditaciones guiadas para niños en YouTube o en aplicaciones móviles como Headspace. Una vez que hayas elegido una meditación guiada, puedes hacer que tus hijos la escuchen contigo en un lugar tranquilo.

4. Practicar el yoga para niños

El yoga para niños es una actividad que combina la meditación, la relajación y la actividad física. Esta práctica puede ayudar a los niños a mejorar su flexibilidad, fuerza y equilibrio, además de aportarles un momento de relajación y concentración.

Puedes encontrar videos de yoga para niños en YouTube o en aplicaciones móviles como Yoga para niños. Una vez que hayas elegido una clase de yoga para los niños, puedes practicarla con ellos en un lugar tranquilo.

Conclusión

La práctica de la meditación y el mindfulness puede ser muy beneficiosa para los niños, ya que les ayuda a mejorar su bienestar emocional y mental y a aprender a concentrarse y a estar más atentos al momento presente. Si quieres comenzar a practicar la meditación o el mindfulness con tus hijos, recuerda que lo importante es hacerlo de una manera que sea divertida y que se adapte a sus intereses y personalidades. ¡Empieza hoy mismo a practicar la meditación y mindfulness con tus hijos!